El sabueso de Vado Marcos: El sheriff Dave Sorrel acababa de regresar a la cárcel después de una abundante comida en el hotel de Vado Marcos. Dejando caer su vieja osamenta en el chirriante sillón giratorio, el sheriff levantó los pies hasta descansarlos encima de la mesa de trabajo y dirigió una furibunda mirada al pelirrojo jovenzuelo que estaba enterándose de los pormenores físicos de una serie de reclamados por la justicia, cuyos retratos, junto con las ofertas que se hacían por sus malas cabezas, ocupaban una parte de la pared del fondo.
Un hombre llamado Ortega: Pozo Mormones no había sido nada hasta que la Union Pacific Railway decidió desviar hacia allí la línea ferroviaria. ¿Por qué hizo semejante cosa la importante compañía? Pozo Mormones poseía maravillosos paisajes, sin duda alguna los más maravillosos de Utah; pero los enlevitados caballeros que se tapan la cabeza con sombreros de seda no suelen encontrar ningún atractivo en los paisajes. Para ellos el Gran Cañón del Colorado podrá ser un estorbo en el camino del ferrocarril, pero nunca un lugar hermoso.
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El sabueso de Vado Marcos: El sheriff Dave Sorrel acababa de regresar a la cárcel después de una abundante comida en el hotel de Vado Marcos. Dejando caer su vieja osamenta en el chirriante sillón giratorio, el sheriff levantó los pies hasta descansarlos encima de la mesa de trabajo y dirigió una furibunda mirada al pelirrojo jovenzuelo que estaba enterándose de los pormenores físicos de una serie de reclamados por la justicia, cuyos retratos, junto con las ofertas que se hacían por sus malas cabezas, ocupaban una parte de la pared del fondo. Un hombre llamado Ortega: Pozo Mormones no había sido nada hasta que la Union Pacific Railway decidió desviar hacia allí la línea ferroviaria. ¿Por qué hizo semejante cosa la importante compañía? Pozo Mormones poseía maravillosos paisajes, sin duda alguna los más maravillosos de Utah; pero los enlevitados caballeros que se tapan la cabeza con sombreros de seda no suelen encontrar ningún atractivo en los paisajes. Para ellos el Gran Cañón del Colorado podrá ser un estorbo en el camino del ferrocarril, pero nunca un lugar hermoso.