Cuando Michele Homalka detuvo su caballo ante la cerca del rancho B 3, en Arlington, al oeste de Arizona, para solicitar como era tradición, un plato de porotos y avena para su caballo, estaba muy lejos de sospechar que aquella visita iba a complicar su apacible vida de una manera demasiado brusca, y al tiempo, trastocaría el curso de su existencia, derivándola hacia senderos en los que aún no se había detenido a meditar.
Description:
Cuando Michele Homalka detuvo su caballo ante la cerca del rancho B 3, en Arlington, al oeste de Arizona, para solicitar como era tradición, un plato de porotos y avena para su caballo, estaba muy lejos de sospechar que aquella visita iba a complicar su apacible vida de una manera demasiado brusca, y al tiempo, trastocaría el curso de su existencia, derivándola hacia senderos en los que aún no se había detenido a meditar.