El “héroe” responde al apodo de “Tombstone” y es una especie de agente de una brigada especial de la policía dedicada en cuerpo y alma a llegar a donde nadie llega en cuestiones de persecuciones a mafiosos, corruptos, traficantes y todo tipo de gente de bien. La figura de esta bestia parda es la de un grandullón de hombros enormes que lo mismo te interroga a puñetazos que te descerraja un tiro en la cara por decirle “hola” sin mayores problemas. Además tiene un “sex appel” tan espectacular que las damas (ya sean secretarias, elegantes ayudantes de la fiscalía o rameras vulgares) pierden irremediablemente el oremus en cuanto aparece, y lo único que quieren es frotarse contra esa musculatura hecha para partir huesos. ¡Y vaya si se parten!