La luz que derramaba la lámpara parecía haberse vuelto sólida. Cualquiera hubiese dicho que tenía peso. Era maciza, densa. Se derramaba sobre el tapete verde y arrancaba extraños reflejos a los naipes. Las manos de los dos hombres se movían un poco trémulas bajo aquella luz. Eran unas manos de dedos largos y expertos. Se adivinaba que pertenecían a dos auténticos jugadores. Cortaban, repartían y lanzaban las cartas con tal habilidad que había momentos en que éstas parecía como si formaran parte de su propio cuerpo. Pero uno de los dos hombres estaba más nervioso que el otro.
Description:
La luz que derramaba la lámpara parecía haberse vuelto sólida. Cualquiera hubiese dicho que tenía peso. Era maciza, densa. Se derramaba sobre el tapete verde y arrancaba extraños reflejos a los naipes. Las manos de los dos hombres se movían un poco trémulas bajo aquella luz. Eran unas manos de dedos largos y expertos. Se adivinaba que pertenecían a dos auténticos jugadores. Cortaban, repartían y lanzaban las cartas con tal habilidad que había momentos en que éstas parecía como si formaran parte de su propio cuerpo. Pero uno de los dos hombres estaba más nervioso que el otro.