La muchacha encargada de la recepción del hotel miraba sorprendida por la estatura de los jóvenes que tenía ante ella, a los rostros y se daba cuenta que no llegaba ninguno de ellos a los treinta años. Puso el libro-registro ante ellos para que escribieran su nombre cada uno. Habían pedido dos habitaciones, lo que le hizo pensar que no se trataba de matrimonio, aclarando ellos al decir que eran hermanos.
Description:
La muchacha encargada de la recepción del hotel miraba sorprendida por la estatura de los jóvenes que tenía ante ella, a los rostros y se daba cuenta que no llegaba ninguno de ellos a los treinta años. Puso el libro-registro ante ellos para que escribieran su nombre cada uno. Habían pedido dos habitaciones, lo que le hizo pensar que no se trataba de matrimonio, aclarando ellos al decir que eran hermanos.