Los numerosos viajeros que ocupaban los lujosos y modernísimos departamentos del tren habían tenido tiempo para todo: para dormir a pierna suelta, para saborear las exquisitas comidas servidas mientras corrían a cerca de ciento cincuenta kilómetros por hora, para leer y charlar en el bar, procurando matar las horas interminables de aquel interminable viaje.
Description:
Los numerosos viajeros que ocupaban los lujosos y modernísimos departamentos del tren habían tenido tiempo para todo: para dormir a pierna suelta, para saborear las exquisitas comidas servidas mientras corrían a cerca de ciento cincuenta kilómetros por hora, para leer y charlar en el bar, procurando matar las horas interminables de aquel interminable viaje.